Hoy hablamos de arquitectura y bioconstrucción con Silvia Ramos, licenciada en arquitectura por la ETSAV (UPC)
Silvia está especializada en diseño interior y en bioconstrucción por el IEB y este año finalizo el máster de bioconstrucción impartido también por el Instituto Español de Baubiologie (IEB) y la Universidad de Lleida (UdL).
Tabla de Contenidos:
Tiene oficina en Barberá del Vallés, un municipio de Barcelona donde atiende a clientes que buscan crear un hogar con el criterio que ella defiende.
Silvia, cuéntanos qué te llevó a estudiar arquitectura.
- De pequeña me llamaba la atención varios oficios: maestra, peluquera, …
Pero fue a partir de la educación secundaria que empecé a interesarme por el diseño interior gracias a la información familiar que recibía y lo que iba conociendo. Con esa edad iba un poco perdida en cuanto a qué estudiar ya que sólo conocía la información a nivel formación y no a nivel laboral. Y arquitectura la veía una buena opción ya que me permitía conocer el edificio entero aunque sólo quisiese diseñar el interior, así que aposté por ello.
Dentro del mundo de la arquitectura has encontrado tu sitio en la bioconstrucción, cuéntanos los motivos.
- Bueno … La carrera de arquitectura no fue nada fácil la verdad, la recuerdo como uno de los peores años de mi vida. Estudié la carrera a la vez que trabajaba en la empresa familiar (reformas) a media jornada y veía como mis noches, mis fines de semana y vacaciones, … Eran para dedicárselo a la universidad y sin ver recompensas por parte de la enseñanza. No me veía indentificada con las asignaturas creativas, para mí el diseño era pensar en cómo iban a vivir las personas, en crear espacios sostenibles a lo largo del tiempo, … No fijaba la atención en crear edificios “bonitos” a priori, ni en la selección de materiales para crear según qué estética, no se me dio bien esa fase, y así estuve 10 largos años hasta que por fin pude finalizar la carrera.
Nada más acabarla, a principios de 2016, me enteré de la existencia de un curso de “casa sana” en Barcelona y me apunté. A día de hoy fue lo mejor que hice ya que este curso me permitió conocer que todo aquello que yo buscaba en mis diseños se contemplaba en la disciplina llamada “bioconstrucción”. Así que una vez finalizado este curso inicial me apunté la máster de bioconstrucción y me especialicé en “diseño interior en bioconstrucción”. Este año , si todo va bien, acabo el máster.
Para las personas que no la conozcan, cómo definirías la bioconstrucción.
- La bioconstrucción o bioarquitectura es aquella forma de construir o diseñar que fija su objetivo en la creación de espacios sanos para las personas, buscan el bienestar personal, una buena relación con el medio ambiente y que sean espacios que duren en el tiempo. Lo resumiría como la creación de una edificación saludable, ecológica y sostenible. Al final se vuelve un estilo de vida en el que se tienen en cuenta muchos factores por el bienestar personal y común, en mi caso dentro de unos límites y con un equilibrio ya que vivimos donde vivimos y no podemos aislarnos en una burbuja y olvidarnos de lo demás.
Cómo es el perfil del cliente que viene a buscar tus servicios.
- Actualmente no me suelen venir clientes que ya conozcan este tipo de arquitectura o construcción. Soy yo la que intento explicarles a lo que me dedico y como se rigen mis diseños y al proporcionarles la información la suelen recibir con buenos ojos. Quizás sí que conocen más la disciplina del Feng Shui (el Feng Shui comparte algunos aspectos con la bioconstrucción pero son cosas distintas) pero a la bioconstrucción de momento le hace falta más difusión aunque cada vez la gente es más consciente de su necesidad en nuestra sociedad.
Crees que la información de una alternativa más saludable a la hora de crear nuestras viviendas y espacios de trabajo, está llegando al consumidor.
- Sí, es algo que va creciendo poco a poco porque los cambios de mentalidad necesitan su tiempo y asimilación. La gente es más consciente de la necesidad de un estilo de vida saludable y eso implica miramientos en todos los aspectos de la vida: alimentación (equilibrada y ecológica), cómo nos vestimos (textiles), productos de higiene y cosmética (sin ingredientes perjudiciales para la salud ni el medio ambiente) y dónde vivimos y qué respiramos (casas y medioambiente saludables).
En el caso de que sea que no, qué crees que podemos hacer entre todos, para que así sea.
- Es necesaria una mayor difusión y fácil acceso a estudios realizados que permitan comprobar a las personas de cómo está nuestra sociedad a nivel de contaminación del aire, materiales de construcción e interiorismo tóxicos para las personas, … La Organización Mundial de la Salud está al corriente de varios aspectos negativos y propone algunas medidas.
Desde tu experiencia, cómo ha evolucionado el sector de la construcción con criterio de biohabitabilidad en los últimos cinco años.
- Pues en los últimos 5 años no sabría decirte porque yo estoy en ello desde hace poco más de 2 añitos jejeje. Pero por los compañeros que se dedican a ello hace años, en todo el territorio español, es verdad que va en aumento, cada año va creciendo el número de profesionales que se interesan por este tipo de construcción y cada vez hay más empresas cuyos productos siguen los criterios de la bioconstrucción, cosa que permite que los precios cada vez sean más accesibles para todo el mundo. Aunque yo no vería justo que los precios de los materiales o elementos “malos” que se hacen con obsolescencia programada, con materiales de corta duración y con ingredientes nocivos para la salud, tuviesen el mismo importe que un material hecho con materia prima de calidad, de proximidad, sin tóxicos para las personas y que se crean para que duren en el tiempo.
Crees que es una tendencia, o simplemente una alternativa.
- Puede parecer una moda pero yo lo considero una alternativa para aquellas personas que nos preocupa el bienestar y la salud. Es innegable a día de hoy, que existen enfermedades ambientales que antes no existían y que cada vez hay más personas afectadas. Esto nos tendría que servir de aviso para que nos demos cuenta de que algo no va bien, de que el camino que llevamos no es el correcto y que debemos de tomar medidas en muchos aspectos y que cada uno puede poner su granito de arena, hacer algo por poco que sea es mejor que no hacer nada y sobre todo creer en lo que haces y ser consciente.
¿En cuestión de equipamiento, qué alternativas ofreces a tus clientes, te involucras hasta ese punto con ellos?
- Mis servicios se centran en: asesoramientos completos para conocer el estado actual de la vivienda o lugar de trabajo a estudiar para después poderle dar recomendaciones personalizadas para que obtenga un espacio más saludable en muchos aspectos de diseño interior y luego la opción de asesoramientos más puntuales si no se quiere o necesita tanta información como sería el color, la iluminación artificial, la purificación del aire interior mediante plantas o el diseño para dar ideas de cara a una posible distribución interior. A parte de los asesoramientos ofrezco proyectos de diseño interior en los que se crea un diseño específico según las necesidades del cliente. Y luego también está la opción de arquitectura aunque mi especialización es el diseño interior, donde se trata lo más accesible y por lo tanto lo que más afecta al usuario.
Con todo esto, permito que el cliente pueda escoger entre recibir información a nivel de recomendaciones o ideas (asesoramientos) o el poder crear un diseño concreto para el espacio o espacios que considere (proyecto de interiorismo).
Mi forma de diseñar tiene en cuenta el bienestar de los ocupantes, cada profesional diseña teniendo unas pautas o preferencias y las mías son estas: salud, ecología y sostenibilidad, una vez interiorizado ya no puedo hacerlo de otra forma.
Con esto quiero decir que es el cliente el que decide hasta donde quiere que llegar.
Me gustaría que nos dieras unas breves pautas para aquellas personas que ya tienen su hogar creado y ahora empiezan a ser conscientes de la relación entre hábitat y salud. ¿Por dónde pueden empezar a hacer cambios?
- Lo primero sería hacer un estudio/asesoramiento, si no quieren o pueden hacer frente al de toda la vivienda, haría el de una estancia clave como sería el dormitorio, esto permite conocer el estado actual de la estancia y así saber dónde habría que actuar, a veces estos cambios son simples actuaciones que no implican gasto económico y en otros casos puede que sí. Sin un estudio no se pueden hacer valoraciones, es por ello que he lanzado este servicio de asesoramientos que pueden ser online o presenciales, para que todo el mundo pueda acceder a ellos aunque, si se puede, es recomendable hacerlo de forma presencial.
Se miran aspectos como, la forma de vivir y actuar de los ocupantes y cómo puede afectar eso a la salud dentro del hogar, los materiales de revestimientos existentes, el tipo de iluminación artificial, el color, …
Muchas gracias Lola por darme la oportunidad de dar difusión al criterio saludable dentro de la arquitectura e interiorismo.
Encantada de apostar por un futuro mejor.
Mil gracias Silvia por tu tiempo.